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La punción seca en Santander despierta cada vez más interés entre personas que buscan aliviar dolores musculares persistentes, mejorar su movilidad y entender mejor cómo funciona su cuerpo. Para arrojar luz sobre esta técnica desde un enfoque claro y cercano, un miembro de Gestoría Alberto y Eduardo conversa con un médico de la clínica In Corpore Sano, un centro fisioterapéutico en Santander con amplia experiencia en tratamientos musculares avanzados. El objetivo de esta entrevista es explicar, con palabras sencillas, qué es la punción seca, cuándo se recomienda y cómo se integra dentro de la fisioterapia, sin necesidad de conocimientos médicos previos.

In corpore Sano, Santander, teléfono: 942 070 990

 

Entrevista sobre la punción seca en Santander

En los últimos años escuchamos hablar cada vez más de la punción seca. Muchas personas nos preguntan si realmente funciona, si duele y si es segura. Para empezar, ¿podría explicarnos qué es exactamente la punción seca y por qué se habla tanto de ella en Santander?

La punción seca es una técnica terapéutica que utilizamos para tratar el dolor muscular, especialmente cuando está relacionado con puntos gatillo miofasciales. Son pequeñas zonas del músculo que se quedan en tensión constante y generan dolor, rigidez o limitación del movimiento. Aquí, en Santander, vemos muchos casos asociados al estrés, a trabajos sedentarios o a sobrecargas físicas, y por eso la técnica se ha popularizado tanto dentro de la fisioterapia en Santander.

 

El nombre llama la atención y a veces genera respeto. ¿Por qué se llama punción seca y qué la diferencia de otros tratamientos con agujas?

Se llama “seca” porque no se inyecta ninguna sustancia. La aguja se utiliza únicamente como estímulo mecánico para provocar una respuesta en el músculo. Es importante aclarar que no tiene nada que ver con la acupuntura, aunque las agujas sean similares. En la punción seca nos basamos en la anatomía y la fisiología del músculo, no en conceptos energéticos. El objetivo es liberar la tensión y normalizar el funcionamiento muscular.

 

Muchas personas conviven con dolor muscular durante años. ¿Por qué ocurre esto tan a menudo?

Porque el músculo tiene memoria. Malas posturas mantenidas, estrés continuado, falta de movimiento o sobrecargas repetidas van generando pequeñas disfunciones que, con el tiempo, se convierten en dolor crónico. En consulta vemos pacientes que han probado de todo y no mejoran porque el origen del problema no se ha tratado de forma específica. Ahí es donde técnicas como la punción seca en Santander pueden marcar la diferencia, siempre integradas dentro de un abordaje global.

 

¿Está indicada para todo el mundo o solo para ciertos perfiles?

No es una técnica universal, pero sí muy útil en muchos casos. Personas con contracturas persistentes, dolor cervical, lumbar, problemas de hombro o sobrecargas musculares suelen beneficiarse bastante. También deportistas, tanto profesionales como amateurs. Eso sí, siempre hacemos una valoración previa. El fisioterapeuta debe decidir si la punción seca es adecuada o si conviene otro enfoque.

 

Desde fuera puede parecer que todo se reduce a pinchar el músculo. ¿Es así?

Para nada. La aguja es solo una herramienta. Lo realmente importante es el conocimiento del profesional. Saber qué músculo tratar, por qué duele y cómo se relaciona con el resto del cuerpo. En un centro fisioterapéutico serio, la punción seca nunca se aplica de forma automática. Se integra dentro de un tratamiento que puede incluir ejercicio, terapia manual y educación del paciente.

 

Una de las preguntas más habituales: ¿duele la punción seca?

Puede resultar molesta de forma puntual, especialmente cuando se activa el punto gatillo, pero suele ser una sensación breve. La mayoría de los pacientes la toleran bien y destacan que el alivio posterior compensa esa molestia momentánea. Después de la sesión, es normal notar agujetas durante uno o dos días, algo totalmente esperable dentro del proceso de recuperación.

¿Es una técnica segura?

Sí, siempre que la realice un profesional cualificado. En nuestra práctica clínica damos mucha importancia a la valoración previa y a explicar bien el tratamiento. Cuando el paciente entiende qué se va a hacer y por qué, afronta la sesión con mucha más tranquilidad. La seguridad y la confianza son pilares fundamentales en la fisioterapia en Santander.

 

¿La punción seca por sí sola es suficiente?

En algunos casos puede aliviar mucho, pero lo ideal es combinarla con otras estrategias. Tras liberar el músculo, el cuerpo está más preparado para moverse bien. Ahí entran el ejercicio terapéutico, la corrección postural y los cambios de hábitos. En In Corpore Sano trabajamos mucho esta parte porque buscamos resultados duraderos, no solo alivio momentáneo.

¿Qué papel juega la educación del paciente?

Es fundamental. Cuando una persona entiende por qué aparece su dolor, deja de verlo como algo inevitable. Aprende a escuchar su cuerpo y a cuidarlo mejor. La punción seca puede ser el punto de partida para ese cambio, pero la prevención es lo que realmente marca la diferencia a largo plazo.

 

Para terminar esta primera parte, ¿por qué cree que la punción seca se ha consolidado tanto en los últimos años?

Porque responde a una necesidad real. Vivimos con prisas, estrés y poco movimiento, y el cuerpo lo paga. La punción seca es una herramienta eficaz para abordar el dolor muscular desde la raíz, siempre dentro de un enfoque profesional y humano. Por eso se ha integrado con tanta naturalidad en la fisioterapia en Santander.

 

Cómo es una sesión de punción seca y qué puede esperar el paciente

En la primera parte hablábamos de qué es la punción seca y por qué se utiliza tanto. Ahora nos gustaría centrarnos en algo muy práctico: ¿cómo es una sesión real de punción seca en Santander desde que el paciente entra en consulta?

Lo primero que hacemos es escuchar. Parece algo sencillo, pero es fundamental. Antes de aplicar cualquier técnica, necesitamos entender qué le ocurre a la persona, desde cuándo siente dolor y cómo afecta a su vida diaria. En la fisioterapia, la entrevista inicial es casi tan importante como el tratamiento en sí.

Después realizamos una exploración manual detallada. Palpamos la musculatura, evaluamos la movilidad y localizamos posibles puntos gatillo. Solo cuando tenemos claro el origen del problema planteamos la punción seca como parte del tratamiento.

 

¿Y qué ocurre en el momento en que se aplica la aguja?

El paciente se coloca en una posición cómoda y accesible para el músculo que vamos a tratar. Utilizamos agujas estériles y de un solo uso, y limpiamos bien la zona. La introducción de la aguja es rápida y precisa. Si alcanzamos el punto gatillo, el músculo suele responder con una contracción breve e involuntaria.

Esa respuesta no es peligrosa; al contrario, nos indica que estamos actuando sobre la zona correcta. El fisioterapeuta controla en todo momento la profundidad y la duración, adaptándose a la tolerancia del paciente.

 

Muchas personas temen el dolor. ¿Qué suele notar el paciente?

La sensación es muy variable. Hay personas que apenas notan nada y otras que sienten una molestia intensa pero muy corta. Lo importante es explicar previamente qué puede ocurrir, porque cuando el paciente sabe qué esperar, la experiencia es mucho más llevadera.

Después de la sesión, es habitual notar una sensación similar a las agujetas durante uno o dos días. Esto es normal y forma parte del proceso de recuperación del músculo.

Otra duda frecuente es cuántas sesiones hacen falta para notar mejoría.

No hay una cifra fija. En problemas recientes, una o dos sesiones pueden ser suficientes. En dolores crónicos, la punción seca se integra dentro de un plan más amplio de fisioterapia, que incluye ejercicio y educación. El seguimiento y la reevaluación nos permiten ajustar el tratamiento según la evolución.

 

A veces se habla de punción seca superficial y profunda. ¿Qué diferencia hay?

La diferencia está en la profundidad a la que se introduce la aguja y en el objetivo terapéutico. La punción seca profunda busca llegar directamente al punto gatillo dentro del músculo, mientras que la superficial actúa de forma más externa. La elección depende del caso, de la sensibilidad del paciente y del criterio del profesional.

En un centro fisioterapéutico, esta decisión nunca es arbitraria, sino que forma parte de una estrategia terapéutica personalizada.

 

¿Existen riesgos o contraindicaciones?

Como cualquier técnica, tiene sus indicaciones y precauciones. No suele aplicarse en personas con fobia intensa a las agujas, alteraciones de la coagulación o infecciones en la zona. Por eso insistimos tanto en la valoración previa. Cuando la técnica está bien indicada y la realiza un profesional formado, es segura.

 

¿Hasta qué punto influye el paciente en el resultado?

Muchísimo. La punción seca puede aliviar el dolor y facilitar el movimiento, pero si la persona no cambia ciertos hábitos, el problema puede reaparecer. El trabajo del fisio en Santander no termina en la camilla: enseñamos ejercicios, explicamos posturas y ayudamos a entender el cuerpo.

En In Corpore Sano insistimos mucho en este enfoque activo, porque es lo que realmente marca la diferencia a largo plazo.

 

¿Diría que la punción seca es solo para personas con dolor intenso?

No necesariamente. Hay personas que la utilizan de forma puntual para prevenir recaídas o mejorar su rendimiento físico. Siempre hablamos de bienestar global, no solo de eliminar un síntoma. Integrada correctamente, la punción seca en Santander puede ser una gran aliada dentro del cuidado de la salud muscular.

 

Beneficios a medio y largo plazo, mitos y visión actual de la punción seca

En esta tercera parte nos gustaría ir un paso más allá del alivio inmediato. ¿Qué beneficios reales aporta la punción seca en Santander cuando se observa su efecto con el paso del tiempo?

Ese es un punto clave. Muchas personas llegan buscando quitarse un dolor concreto, pero descubren algo más amplio. A medio y largo plazo, la punción seca mejora la calidad del tejido muscular, no solo el síntoma. Cuando liberamos puntos gatillo, el músculo recupera elasticidad, fuerza y coordinación, y eso se traduce en un movimiento más eficiente y menos propenso a lesionarse.

Dentro de la fisioterapia en Santander, esto es fundamental, porque nos permite trabajar no solo sobre el dolor, sino sobre la causa que lo genera y lo mantiene.

 

¿Influye también a nivel psicológico o emocional?

Muchísimo. El dolor crónico genera miedo al movimiento. Muchas personas dejan de hacer cosas por temor a que el dolor vuelva. Cuando, gracias a la punción seca, el paciente se mueve con menos molestias, recupera confianza en su cuerpo. Ese cambio es enorme, porque le permite volver a caminar, hacer ejercicio o simplemente trabajar con menos tensión.

Desde la experiencia clínica, vemos que este cambio mental es tan importante como el físico. El fisioterapeuta acompaña en ese proceso, explicando que moverse no es peligroso, sino necesario.

 

¿La punción seca ayuda a que el dolor no vuelva?

Ayuda, pero no actúa sola. Al liberar el músculo, reducimos uno de los factores que perpetúan el dolor. Sin embargo, si no se modifican los hábitos que lo provocaron, es posible que reaparezca. Por eso insistimos en un enfoque preventivo.

En un centro fisioterapéutico, la punción seca se utiliza como una herramienta para facilitar el cambio: menos dolor, mejor movimiento y, a partir de ahí, educación postural, ejercicio y adaptación del estilo de vida.

 

Ha mencionado varias veces el ejercicio. ¿Por qué es tan importante combinarlo con la punción seca?

Porque el músculo necesita aprender a funcionar bien de nuevo. La punción seca libera la tensión, pero el ejercicio consolida el cambio. Tras una sesión, el músculo está más receptivo y responde mejor al trabajo activo.

En fisioterapia, utilizamos ejercicios sencillos y adaptados, no rutinas genéricas. El objetivo es que la persona se sienta capaz y autónoma, no dependiente del tratamiento.

 

¿Qué ideas erróneas se encuentra con más frecuencia en consulta?

Una muy común es pensar que cuanto más duele, mejor funciona. Eso no es cierto. La intensidad no determina la eficacia. Otra idea equivocada es creer que la punción seca lo cura todo. Es una técnica muy útil, pero no sustituye a una valoración ni a un tratamiento completo.

También hay quien piensa que es peligrosa. Cuando la aplica un fisio formado y con experiencia, es una técnica segura y controlada.

Algunas personas piensan que es una moda. ¿Qué opina?

No lo es. Lleva años utilizándose y su presencia ha crecido porque funciona cuando está bien indicada. No todas las técnicas sobreviven al tiempo; las que lo hacen es porque aportan resultados. La punción seca en Santander se ha consolidado porque responde a un problema muy común: el dolor muscular persistente.

 

¿Dónde encaja la punción seca dentro de la fisioterapia actual?

Encaja dentro de una visión moderna, centrada en la persona. Hoy entendemos que el cuerpo es un todo y que el dolor no aparece por casualidad. La punción seca es una herramienta más, muy eficaz, pero siempre integrada en un plan global de fisioterapia en Santander que combina tratamiento manual, ejercicio y educación.

Ese es el enfoque que aplicamos en In Corpore Sano, donde el objetivo no es solo aliviar, sino enseñar a cuidar el cuerpo a largo plazo.

 

Para terminar, ¿qué le diría a alguien que está dudando si probar la punción seca?

Le diría que se informe, que pregunte y que acuda a un profesional cualificado. La punción seca no es una técnica milagrosa, pero bien aplicada puede marcar un antes y un después en la forma de entender y tratar el dolor muscular. Es una oportunidad para empezar a moverse mejor y vivir con más bienestar.

 

Valoración final

A lo largo de esta entrevista, hemos comprobado que la punción seca en Santander es mucho más que una técnica puntual. Se trata de una herramienta integrada dentro de la fisioterapia, orientada a aliviar el dolor, mejorar la función muscular y fomentar un cuidado activo y consciente del cuerpo.

Desde la experiencia profesional compartida en esta conversación, queda claro que acudir a un centro fisioterapéutico en Santander con un enfoque integral y humano puede marcar la diferencia para quienes buscan soluciones eficaces, seguras y duraderas para su bienestar.